Mostrando entradas con la etiqueta *Flashes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta *Flashes. Mostrar todas las entradas

16 mayo 2010

Flashes: “Los músicos de Bremen” en Riga

El monumento a los Músicos de Bremen (Brēmenes muzikanti),
de la escultora Krista Baumgaertel, detrás de la iglesia
de San Pedro, en Riga. (© Albert Lázaro-Tinaut)

Los músicos de Bremen (Die Bremer Stadtmusikanten) es un célebre cuento tradicional alemán, concretamente de la Baja Sajonia, recogido por los hermanos Karl y Wilhelm Grimm en la segunda edición de sus Kinder- und Hausmärchen (‘Cuentos para la infancia y el hogar’, 1819). En los países de lengua alemana, y después en todo el mundo, esta historia de animales tuvo mucho éxito (aquí podéis leer una versión en castellano), y muchísimos ilustradores han representado a sus protagonistas (un asno, un perro, un gato y un gallo) en numerosos libros y revistas infantiles.

Curiosamente, en la capital de Letonia, Riga, encontramos un monumento –denominado, en letón, Brēmenes muzikanti–, que representa la manera como se muestran tradicionalmente estos cuatro animales. La explicación de la presencia de este monumento es sencilla: Riga fue fundada en 1201 por un alto eclesiástico procedente de Bremen, Albrecht (Alberto) von Buxthoeven (Bexhövede, Baja Sajonia, 1165 - Riga, 1229), que fue el primer obispo de Livonia y que al año siguiente fundó también la orden militar de los Fratres militiae Christi, más conocidos como Hermanos de la Espada o Caballeros Portaespadas, los cuales fueron decisivos en las denominadas Cruzadas del Norte para la cristianización de los pueblos paganos del Báltico oriental.

El monumento que encontramos en el núcleo medieval de Riga (Vecrīga), junto al ábside de la iglesia de San Pedro, obra de la escultora Krista Baumgaertel, fue un regalo que la ciudad de Bremen hizo, en 1990, a la comunidad wesfaliana que hermana la capital letona con la ciudad alemana de Ense (Westfalia del Norte).


El monumento dedicado a Die Bremer
Stadtmusikanten, situado junto
al Ayuntamiento de la ciudad alemana
de Bremen e inaugurado en el año 1953.
Es obra del escultor Gerhard Marcks.
(© Magnus Manske, 2004)


Esta historia tradicional ha dado lugar a muchas interpretaciones artísticas, no únicamente obras de ilustradores de cuentos, como el transeúnte ha explicado, sino también de escultores (ésta de Riga es un ejemplo de ello, y lo es también la escultura del alemán Gerhard Marcks, que se inauguró en la ciudad de Bremen en 1953) y de dibujantes de cómics, músicos, autores teatrales (en 1977, el polifacético cantante y escritor brasileño Chico Buarque se inspiró en ella para escribir y musicalizar Os santimbancos; también se han hecho adaptaciones trasladadas a nuestro tiempo, como por ejemplo una ambientada en los Balcanes en guerra, presentada en el Theater Laboratorium de Oldemburgo).


Los cuatro animales protagonistas
del cuento Los músicos de Bremen,
según una ilustración de Roser
Capdevila para un capítulo
de la serie de televisión Las tres
mellizas
(carátula de un DVD
de Cromosoma, 2005).



Pero los animales de los Músicos de Bremen han sido especialmente protagonistas de películas de animación y series televisivas: en 1994, por ejemplo, uno de los capítulos de la serie Las tres mellizas, realizada por la ilustradora Roser Capdevila y producida por Cromosoma para la Televisió de Catalunya, recogía este cuento. ¡En Japón, la historia hasta se ha incluido en una serie de estilo anime!


Traducción del catalán: Carlos Vitale

25 abril 2010

Flashes: En Leiden con Paul Celan


Cuando el transeúnte visitó la ciudad holandesa de Leiden, hace dos años y medio, descubrió que en las paredes de varios edificios próximos a la Universidad se reproducían poemas de unos cuantos poetas universales, como este de Paul Celan (perteneciente a su libro Die Niemandsrose [‘La rosa de nadie’], de 1963), del que transcribe la traducción castellana de José Luis Reina Palazón*:

MEDIODÍA CON CIRCO Y CIUDADELA


En Brest ante los anillos en llamas,

en la carpa que al tigre vio saltar,

allí te oí, finitud, que cantabas,

allí te vi, Mandelstamm.


Sobre la rada el cielo colgante,

la gaviota sobre la grua vino a estar.

Lo infinito cantaba, lo constante, –
tú, cañonera, te llamas “Baobab”.


Saludé a la tricolor

con una rusa palabra –

Lo perdido no se perdió,

el corazón, fuerte plaza.


Tal vez en otra ocasión hable de Leiden; ahora, sin embargo, el transeúnte quiere detenerse brevemente en la figura de Paul Celan, uno de los mayores poetas del siglo XX, un judío asquenazí cuyo verdadero nombre era Paul Antschel, en su alemán familiar, o Ancel, en rumano, apellido éste con el que formó el anagrama de su seudónimo.


Celan nació en Czernowitz, una ciudad periférica del entonces Imperio austrohúngaro, el 23 de octubre de 1920, y se suicidó en París, arrojándose al Sena desde el puente Mirabeau, el 20 de abril de 1970. Czernowitz era entonces una ciudad de la Bucovina rumana (su nombre, en rumano, es Cernăuţi), y actualmente pertenece a Ucrania con el nombre eslavizado de Chernivtsi (Чернівці). Lugar de encuentro de culturas, pues en los años de la infancia del escritor convivían allí judíos (que eran mayoría, unos 42.600), rumanos (unos 30.400), alemanes (16.400), ucranianos (11.200), polacos (9000), rusos (1500) y húngaros (600).

Celan recibió su primera educación en hebreo (su padre era un judío sionista y ortodoxo), pero la lengua familiar era el alemán de su madre. Ya en su adolescencia abandonó las ideas sionistas y se aproximó a grupos socialistas judíos que en aquella época apoyaban la causa republicana durante la guerra civil en España. Cuando las tropas alemanas ocuparon su ciudad natal, durante la segunda guerra mundial, sus padres fueron deportados a campos de exterminio, en los que murieron, y él fue enviado a Moldavia y sometido a trabajos forzados. Al finalizar la guerra se estableció en Bucarest, en 1947 fue a Viena, y al año siguiente llegó a Francia. Vivió también en Ginebra (donde trabajó como traductor para las instituciones internacionales), Alemania e Israel.

Escribió en prosa, pero sobre todo poesía, una poesía críptica plagada de referencias bíblicas, en la que solía jugar con las palabras y los sonidos, lo cual dificulta su interpretación y su traducción, por lo que tuvo dificultades para publicarla. También destacó como traductor literario al alemán y el hebreo.

El transeúnte no se detendrá aquí a detallar su biografía y su obra, que pueden encontrarse fácilmente en la red. Sólo mencionará su desencuentro con Martin Heidegger, a causa de la postura de éste ante el nazismo, aunque el pensamiento del alemán pesó mucho sobre su personalidad intelectual, igual que el de Theodor Adorno, con quien también tuvo discrepancias, ya que ninguno de los dos mostró el interés por su obra que él esperaba. Quien sí lo mostró, en cambio, fue George Steiner, el cual lo reconoció como uno de los grandes poetas de su época.

El Holocausto y el exilio marcaron indeleblemente su subconsciente, hasta el punto de lo que lo condujeron a la autodestrucción. Niemend / seugt für den / Zeugen (‘Nadie / testimonia por el / testigo’) , escribió en uno de sus poemas de Atemwende (‘Cambio de aliento’, 1967): tres versos que invitan, sin duda, a reflexionar.

* Paul Celan: Obras completas. Traducción de José Luis Reina Palazón. Prólogo de Carlos Ortega. Editorial Trotta, Madrid, 1999. 4.ª edición, 2004, p. 183.

© de la fotografía inicial: Albert Lázaro-Tinaut.
El retrato de Paul Celan es de autor desconocido.

23 marzo 2010

Flashes: Derby

Una de las efímeras curiosidades que el transeúnte encontró
paseando por Derby.

Derby es una ciudad del centro de Inglaterra, capital del condado de Derbyshire, en la región de East Midlands. La población del municipio supera los 230.000 habitantes. Fue una de las primeras localidades a las que llegó el ferrocarril, en 1840, lo cual la convirtió pronto en un próspero centro industrial y un estratégico nudo de comunicaciones ferroviarias. Pero no obtuvo el estatuto de ciudad hasta 1977, con motivo del 25.º aniversario de la coronación de la reina Isabel II.

Derby es famosa, entre otras cosas, por haber sido uno de los centros más importantes de la primera revolución industrial, que allí se inició en 1717. En el año 1759 Jedediah Strutt (1726-1797) patentó la máquina tejedora de algodón conocida como Derby Rib Attachment, que entonces revolucionó el sector. Más tarde se instalarían otras industrias, como la primera fábrica de coches y motores de aviación Rolls-Royce, fundada en 1904. Allí se fabrican también algunos componentes para los aviones Bombardier y para los vehículos de la firma japonesa Toyota.


Una de las viejas construcciones industriales de la ciudad, el Silk Mill (molino de la seda), alberga el Derby’s Museum of Industrial and History. Es uno de los numerosos molinos textiles que se encuentran (y se pueden visitar) en el valle del río Derwent, corrupción de la denominación gaélica Djúra-bý, que los anglosajones (o los vikingos, que convivieron con ellos) habrían convertido en Deoraby, de la cual proviene el nombre de la ciudad. Los invasores romanos establecieron allí un asentamiento militar, que denominaron Derventio.


El centro comercial de Derby. Al fondo, la torre
de la catedral anglicana de Todos los Santos.


Además de abundantes muestras de arqueología industrial, Derby tiene una catedral anglicana, fundada en el año 943 como colegiata real por el monarca anglosajón Edmundo I y reconstruida en estilo gótico durante el siglo XVI, a la que se añadió, en 1725, una torre de 68 metros. Pero su consagración como catedral, dedicada a Todos los Santos, data del 1 de julio de 1937. También encontramos en la ciudad otros lugares interesantes, como la iglesia de St. Alkmund, de estilo georgiano, edificada en 1846; el Pickford’s House Museum, construido en el año 1770 por Joseph Pickford (1734-1782), y la St. Helen’s House, del mismo arquitecto, que data de 1766.

Fotografías © Albert Lázaro-Tinaut.
Clicad sobre ellas para ampliarlas.


Traducción del catalán: Carlos Vitale.

10 febrero 2010

Flashes: Civitavecchia

¿Unos centímetros más para aparcar?

Civitavecchia es una ciudad italiana de 52.000 habitantes, a orillas del mar Tirreno, que forma parte administrativamente de la provincia de Roma, en el Lacio, y es, de hecho, el puerto de la capital italiana, de la que dista unos 65 km.

De origen etrusco, fue denominada Centumcellae por los romanos, pero sus pobladores le dieron el nombre de Civitas Vetula cuando la reconstruyeron, en el siglo IX, después de que fuera tomada y saqueada por los sarracenos. Desde entonces y hasta la unificación de Italia (1870) formó parte de los Estados Pontificios, y adquirió el rango de ciudad en 1693.

Destruida por los bombardeos aliados durante la segunda guerra mundial y reconstruida tras el conflicto bélico, Civitavecchia conserva escasos restos de su pasado. Entre éstos destaca, sin duda, el Forte Michelangelo, levantado entre 1508 y 1537 en la zona portuaria, cuyo torreón principal fue proyectado, según la tradición (no confirmada), por el polifacético Miguel Ángel (el célebre escultor, pintor, arquitecto y poeta renacentista Michelangelo Buonarroti, 1475-1564). También se conservan algunos lienzos de las murallas medievales y varias iglesias, entre las que sobresale la catedral barroca de San Francisco, encarada al mar, cuya construcción se terminó en 1782; devastada por los bombardeos en 1943, fue reconstruida en 1950.

El escritor francés Stendhal (Marie-Henri Beyle) fue cónsul de Francia en Civitavecchia durante un breve período de su vida, en la década de 1830.

La actividad económica de Civitavecchia gira alrededor de su importante puerto mercante y de viajeros, y de dos polémicas centrales termoeléctricas. Algunos barrios de la ciudad, sobre todo los más alejados del frente marítimo, se degradaron notablemente en el último tercio del siglo XX.

Fotografía: © Albert Lázaro-Tinaut (clicad sobre ella para ampliarla).

28 enero 2010

Flashes: Grenoble


La ciudad francesa de Grenoble, situada a unos 100 km al sudeste de Lyon, es la capital del departamento del Isère, en la región de Ródano-Alpes. La población del municipio es de unos 157.000 habitantes, aunque la de su comunidad metropolitana (que incluye algunos municipios vecinos) sobrepasa el medio millón de personas.

Grenoble es célebre, sobre todo, por haber nacido allí Marie-Henri Beyle (1783-1842), más conocido por su seudónimo Stendhal, autor de obras tan notables como Le Rouge et le Noir ('El rojo y el negro', 1830) y La Chartreuse de Parme ('La cartuja de Parma', 1839).

Au Vieux Manoir, cuyo cartel aparece en la imagen, es un célebre pub-discoteca que se encuentra en el número 50 de la rue Saint Laurent, en el barrio del mismo nombre, uno de los más antiguos de la ciudad, situado en la orilla derecha del río Isère y a los pies de la fortaleza de la Bastille.

Fotografía: © Albert Lázaro-Tinaut (clicad sobre ella para ampliarla).

19 enero 2010

Flashes: La Orotava (Tenerife)


Fotografía: © Albert Lázaro-Tinaut.